Acción y voluntad quedan
englobadas en la palabra donar cuando se traspasa algo de un sujeto a otro, de
forma gratuita. En estas últimas semanas han coincidido diferentes actividades
en Ourense a favor de la donación. Con la inestimable colaboración de ALCER
(Asociación para la Lucha Contra las Enfermedades Renales), del Cineclube Padre
Feijoo y de los médicos especialistas en trasplantes, el II Ciclo de Cine y
Medicina culminaba su última etapa con la proyección del documental “La
Intérprete” (Antonio P. Molero, 2015), una película centrada en diferentes
personas relacionadas con el mundo de la donación de órganos. De esta manera
pudimos conocer la historia de Silvia, una enfermera políglota encargada de
comunicarse con aquellos prójimos que no hablando español pudieran convertirse
en posibles donantes, así como con los enfermos extranjeros y sus familiares.
También contemplamos las vivencias de diferentes enfermos en un piso
comunitario de Madrid a la espera de su ansiado trasplante, las crónicas del
dolor y la desesperación que se transforman en esperanza de vida para tantas otras
personas.
Casi al mismo tiempo,
coincidiendo con la Semana contra la Leucemia (21 al 28 de junio), bajo el lema
de “La Fábrica de Células Imparables”, la Fundación Josep Carreras intentaba
llamar nuestra atención sobre su programa de investigación basado en una
novedosa técnica de inmunoterapia capaz de conseguir la remisión de la
enfermedad en el 85% de los pacientes con leucemia linfoblástica aguda y en el
50% de los pacientes con linfomas no-Hodgkin agresivos. Una carpa informativa
situada en la ourensana Rúa do Paseo nos permitió sentir muy de cerca los
avatares de los afectados, al fin al cabo espejos de nosotros mismos, de
nuestros familiares y amigos, porque ninguno somos inmunes a esta enfermedades.
Hasta hace pocos años este tipo de técnicas nos parecían ciencia-ficción. Hoy
en día están al alcance de nuestras manos. Sólo precisan la inversión
suficiente. Los linfocitos T del propio paciente pueden modificarse genéticamente
para que sean capaces de reconocer las células tumorales y eliminarlas, sin
necesidad de padecer los efectos secundarios de la radioterapia o de la
quimioterapia.
Cada año, por estas
fechas, se intensifican los llamamientos del Centro de Transfusiones de Galicia
para incrementar las reservas de sangre en nuestra comunidad.
Desafortunadamente en épocas vacacionales, coincidiendo con el incremento de
los desplazamientos por carretera, también suelen incrementarse las urgencias
provocadas por los accidentes de tráfico. Por ello resulta tan necesaria
nuestra voluntad para actuar solidariamente con aquellos semejantes, para que
cuando lo necesiten puedan recibir, parcial o totalmente, parte de lo más valioso
de nuestras vidas para que las suyas sigan existiendo. Y es que la existencia
humana transcurre tan deprisa.
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