CREA, INVENTA, IMAGINA... ¡NO COPIES!

Protected by Copyscape DMCA Takedown Notice Violation Search

12 julio 2014

TDAH


Estas siglas esconden tras de sí un problema. Según progresa la sociedad y los conocimientos médicos avanzan, nuevas patologías van conformando su existencia. 

El título sirve para definir el Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH), una alteración del comportamiento que según algunas estimaciones podría afectar al 10% de los niños en edad escolar. Por razones todavía desconocidas, afecta tres veces más a los varones que a las hembras. 

Resulta difícil escapar a la controversia siempre que tratamos este tema. Una aclaración previa: no es nuestra intención cuestionar la existencia del TDAH. Me explico. El Dr. Leon Eisenberg, un médico que dedicó gran parte de su vida intentando demostrar que el TDAH constituía una patología real, sorprendentemente, poco antes de fallecer declaró que estábamos ante un ejemplo más de una enfermedad ficticia. Los que aportan combustible para que el debate continúe candente se basan en ciertos apuntes epidemiológicos y sociales. 

En Estados Unidos, los expertos estiman que uno de cada diez niños padece un TDAH. Sin embargo, en Francia, el número de niños diagnosticados de esta patología se reduce al 0.5%

Estas profundas diferencias se deben a dos enfoques completamente diferentes a la hora de abordar la enfermedad. Mientras en Estados Unidos los psiquiatras sostienen que el TDAH tiene una fase biológica, y por lo tanto sugestiva de tratamiento con fármacos, en Francia los expertos defienden las causas psicosociales en la génesis del trastorno, y para tratarlo y corregirlo hacen énfasis en el entorno social del niño, valorando la psicoterapia o la terapia familiar mucho más que los medicamentos. 

En el Reino Unido, el flamante nuevo Presidente del Real Colegio de Psiquiatras, el Dr. Simon Wessely, ha mostrado su preocupación por lo que él considera medicalización de los niños, destacando la presiones familiares, sociales y económicas a las que se ven sometidos los médicos a la hora de tratar el TDAH.

Los fármacos estimulantes representan el tratamiento más conocido y empleado en estos casos. Aunque no existen por el momento pruebas de efectos secundarios indeseables a largo plazo, el manejo de estos medicamentos produce incomodidades a sus consumidores, de tipo digestivo, pero también irritabilidad e insomnio. Pero también es cierto que los fármacos destinados a tratar el comportamiento impulsivo y las dificultades de atención presentes en estos niños resultan tanto más eficaces cuando se utilizan combinados con terapias de tipo conductual.

Recientemente, la Academia Americana de Pediatría ha publicado un informe clínico que recoge las estrategias necesarias para reducir el riesgo de desarrollar un futuro trastorno en el uso de sustancias (alcohol, marihuana y otras drogas) en niños y adolescentes con TDAH, así como las recomendaciones para prescribir, de forma segura, los medicamentos de tipo estimulante.

Aunque el Mundial de Fútbol ha llegado a su fin, en el caso del TDAH la pelota continúa estando en el alero.

No hay comentarios: