Sabedor de nuestra afición por la antropología, el siempre observador Aloysius nos ha hecho llegar un artículo de la revista “Ethics, Medicine and Public Health” cuyo título nos ha llamado poderosamente la atención: “¿A qué santo rezar para luchar contra la Covid?”.
Y aunque sólo Dios puede hacer milagros, en las hagiografías católica y ortodoxa proliferan los santos abogados contra muchas de las enfermedades que han venido atormentando a nuestros prójimos desde los albores de la cultura cristiana.
Algunos de los más venerados son San Antonio Abad contra el herpes, San Vito contra la epilepsia, y Santa Lucía contra la ceguera. San Lucas es el patrono de los médicos y los santos Cosme y Damián de los cirujanos. Pero la palma, y no solo del martirio, se la lleva San Blas, intercesor frente a las enfermedades de la garganta, la hidropesía, las ampollas de la piel, los dolores de la dentición, las enfermedades respiratorias, las patologías de la vejiga y las vías urinarias.
Y es que San Blas de Sebaste, el santo obispo armenio, fue martirizado en la época del emperador romano Licinio, a principios del siglo IV. Previamente, además de curar a sus compañeros de cautiverio, salvó la vida de un niño que se había atragantado con una espina de pescado. Sus curaciones milagrosas habrían beneficiado tanto a humanos como a animales. Mi madre todavía conserva una pequeña figura de este santo tan milagrero, procedente de Dubrovnik, la ciudad croata de la que es patrón.
La invocación de los santos como auxilio de la medicina alcanzó su punto más álgido durante la Edad Media. Y aunque desde el Renacimiento se fueron separando las dimensiones físicas y espirituales del enfermar, en pleno siglo XXI los devotos han seguido implorando la ayuda de los santos, incluso más cuando todos nos hemos visto desbordados por el coronavirus SARS-Cov-2, del que cada día seguimos aprendiendo un poco más.
Pues bien, los autores trabajo del anteriormente referenciado, pertenecientes a centros médicos y universitarios de Montigny-le-Bretonneux (Francia) y Gorizia (Italia), entre el 21 y el 25 de agosto de 2020 analizaron en Twitter y Facebook las respuestas recibidas a la pregunta: ¿a qué santo le rezaría para combatir la Covid?.
Tan peculiar encuesta alcanzó a 15840 personas, el 92% europeos. Un total de 1158 adultos respondieron de manera anónima, la mayoría ciudadanos franceses e italianos. Por razones éticas, no se evaluaron las cuestiones relacionadas con la cultura, edad y sexo de los participantes. ¿Adivinan cuáles fueron los santos más implorados?: Santa Rita (558), San Roque (268) y San Sebastián (95).
Nada de extrañar, pues la primera es la abogada de las causas imposibles, mientras el culto de los otros dos venerables ha sido vinculado tradicionalmente a la lucha contra la peste y otras epidemias. Por cierto, La Virgen María sólo obtuvo 3 votos, mientras el mismísimo Jesús y el ínclito San Blas consiguieron 1.